Los doctores están abriendo las entradas principales digitales

Durante la temporada normal de la influenza, las salas de espera en los hospitales y los consultorios de los doctores son una fuente de preocupación para muchos pacientes. Las salas de espera congestionadas tienen el potencial de exponer a los pacientes a la enfermedad. La pandemia del coronavirus solo amplificó esta preocupación. Obligó a muchos consultorios médicos a cerrar sus áreas comunes y hacer que los pacientes esperen por sus citas en la relativa seguridad de sus autos.

Mientras que esto incrementa la seguridad de los pacientes, esta solución tiene sus desventajas: es incómodo para los realmente enfermos, y las temperaturas en declive del invierno pueden ser un problema para aquellos pacientes que se enfrentan a una cita retrasada. Como respuesta a este problema, muchos consultorios médicos han empezado a enfatizar la telemedicina.

Las citas digitales ahora son una nueva experiencia normal para los pacientes. Las encuestas sugieren que 76 por ciento de las personas ven la telemedicina como una opción que están dispuestos a considerar para recibir atención médica—incluso después de que pase la pandemia. Las empresas que proveen seguros de salud también están adoptando la difusión de la telemedicina. Los Centros para Servicios de Medicare y Medicaid, por ejemplo, temporalmente han aprobado 80 nuevos servicios vía telemedicina. 

La tendencia de la telemedicina está posicionada para darle a muchos pacientes un mayor control de su salud. Este es un ejemplo de cómo el distanciamiento social, una necesidad durante la pandemia del coronavirus, ha obligado a los proveedores de salud a adoptar las entradas principales digitales (“digital front doors”). 

El concepto de entradas digitales principales reconoce que, conforme los servicios de salud cada vez más adoptan las interacciones en línea, las prácticas médicas necesitan enfocarse en proveer servicios digitales comprensivos . Eso va más allá de la presencia en línea que los consultorios de los doctores ya tienen —como la capacidad de coordinar citas en línea, tener acceso a los registros de salud, y revisar los resultados de exámenes. 

Estos servicios fuerzan a los pacientes hacia un papel en gran medida pasivo. Pero el concepto de entradas principales digitales enfatiza el deseo del paciente de controlar cada aspecto de su experiencia de salud. Uno de los beneficios más grandes de las entradas principales digitales es que, a diferencia de los consultorios, estas siempre pueden estar abiertas. Eso le permite a los pacientes accesar información crucial para administrar su salud en un horario que les resulte conveniente. 

Las entradas principales digitales también permiten realizar el triaje remoto de pacientes. Los pacientes que se encuentran con síntomas de una enfermedad desconocida pueden volverse temerosos —un problema que puede ser amplificado por las barreras erigidas por la pandemia. El triaje virtual ayuda a que los pacientes tengan acceso a un diagnóstico en tiempo real. Este le informa a los pacientes los pasos que necesitan tomar para sentirse mejor. Esta información elimina la necesidad de realizar una visita presencial al doctor. En cambio, los pacientes pueden buscar otros especialistas médicos que sean más adecuados para satisfacer sus singulares necesidades de tratamiento. 

Otro servicio que las entradas principales digitales pueden proveer es el monitoreo remoto de los pacientes luego de que estos sean dados de alta en un hospital o de recibir tratamiento de un médico clínico. Los equipos de monitoreo remoto, como los oxímetros digitales de pulso y los termómetros digitales, ya están siendo utilizados por los doctores para monitorear a los pacientes de alto riesgo que se recuperan del coronavirus. Esta tecnología le permite a los doctores intervenir rápidamente si los pacientes empeoran su condición. 

Al automatizar muchos procesos, las entradas principales digitales también simplifican la administración de los consultorios médicos, lo cual podría aumentar la eficiencia, incrementar las ganancias, y contribuir a una mejor experiencia para los pacientes. Los procesos presenciales que consumen tiempo, como revisar la historia médica del paciente, pueden realizarse mediante un check-in previo a la cita, el cual puede realizarse en línea o a través del teléfono. Eso también puede ser coordinado según la conveniencia del paciente. Esto significa que los pacientes enfermos pasan menos tiempo en los consultorios médicos, donde podrían infectar a otros. 

Las entradas principales digitales reducen el tiempo de espera para los pacientes, quienes pueden volver a sus actividades diarias, y para los profesionales médicos, quienes pueden pasar más tiempo interactuando de manera significativa con otros pacientes. Al automatizar y digitalizar muchos de los procesos esenciales para la conducción de los consultorios médicos, las entradas principales digitales pueden proveer datos que los consultorios médicos y hospitales pueden usar para evaluar su propia eficiencia. No solo eso ayuda a eliminar el desperdicio y las ineficiencias, haciendo que los negocios sean más rentables, sino que también ayuda a proveer un resultado final mejorado para todos los involucrados.

Este artículo fue publicado originalmente en HumanProgress.org (EE.UU.) el 8 de febrero de 2021.